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Riesgo Reputacional

Riesgo Reputacional

Un modelo de prevención específico

Los riesgos reputacionales son aquellos que surgen de una percepción negativa de los clientes, contrapartes, accionistas, inversores o reguladores que pueden afectar desfavorablemente a la capacidad de un banco para mantener su existencia o establecer nuevas relaciones de negocio y continuar teniendo acceso a fuentes de financiación.

Dada la gran variedad de motivos que pueden originar este tipo de riesgos, se han de gestionar bajo un modelo único y distinto de otros riesgos, aunque siempre dentro de los umbrales establecidos en el marco de apetito al riesgo de la entidad.

El propósito de la gestión de estos riesgos consiste en su prevención, identificación y control, de manera que se reduzca su probabilidad de ocurrencia y se mitigue su eventual impacto, para lo cual la entidad dispone de diferentes herramientas.

Por ejemplo, se realiza un diagnóstico y medición periódico de la percepción y de las expectativas de los principales grupos de interés de la entidad. Este sistema, basado en la metodología RepTrak®, permite identificar las palancas clave de la reputación e influir de forma activa en las mismas.

Tendencias del entorno

Uno de los aspectos más importantes para prevenir riesgos reputacionales es conocer las tendencias del mercado y del entorno, así como lo que se dice de la entidad en los medios de comunicación y en las Redes Sociales. Con este fin, Bankinter dispone de un exhaustivo sistema de monitorización, análisis y valoración de su impacto reputacional.

Asimismo, el Comité de Productos de la entidad identifica y evalúa los posibles riesgos reputacionales con carácter previo a la comercialización de un nuevo producto o servicio.

Por otra parte, periódicamente se realiza un seguimiento trimestral a través de una serie de indicadores internos y externos de eventos con impacto reputacional, de acuerdo con las directrices marcadas por la Autoridad Bancaria Europea.

Además, el área de Reputación Corporativa del banco tutela un plan de gestión de crisis con el fin de establecer los canales de comunicación y los protocolos de actuación ante cualquier emergencia o crisis, en aras de proteger la reputación de la entidad y de preservar la continuidad del negocio.

Bankinter también facilita a los empleados diversos manuales de conducta y ética profesional, a fin de sensibilizarlos sobre la importancia de este riesgo, con el objetivo de que actúen como primera línea de defensa para proteger la reputación de la entidad.

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